Hay lugares donde las ideas no se apagan, donde el pensamiento encuentra abrigo, y la conversación se transforma en semilla de futuro. Ese lugar, en Elda y Petrer, se llama La Tertulia.
Todo empezó, como empiezan muchas cosas importantes, con personas que decidieron reunirse. Hombres como Manuel Serrano, Joaquín Planelles, José Luis Bazan o Ramón Candela, entre otros compartían café, almuerzo y sobre todo, conversación.
Hablaban de sus pueblos, del entorno que habitaban, de cómo mejorar la vida cotidiana de quienes los rodeaban. No tenían más pretensión que pensar en común y hacerlo con honestidad.
Hoy, aquella tradición ha encontrado un nuevo escenario: la antigua Librería Vidal, en la calle Nueva, 7 de Elda. Un lugar entrañable para muchas generaciones que acudían allí en busca de material escolar, papelería o simples útiles de oficina. Todo estaba en su sitio, todo tenía su orden. Hoy, esas mismas estanterías guardan algo distinto: ideas, voces, propuestas.
Cada último viernes de mes, a las cinco de la tarde, las puertas de La Tertulia Asociación Cultural de Elda y Petrer se abren para hablar del presente y del porvenir. Se invita a todos, en especial a jóvenes que les cuesta acudir y despertar, vecinos, colectivos, representantes públicos, trabajadores, estudiantes, empresarios.
No hay distinciones, solo el deseo compartido de construir.
El ambiente es libre, respetuoso y abierto. Se conversa sin imposiciones. Se escuchan las voces. Se recogen las inquietudes.
Y, aunque a veces cuesta ver resultados inmediatos, el esfuerzo no es en vano. Porque el cambio profundo empieza con la palabra.
Porque cada tertulia deja una mensaje. Y porque desde este espacio han nacido propuestas reales: un premio literario remunerado, que invita a reflexionar sobre temas de actualidad, y un certamen de diseño de indumentaria festera, que busca dar una oportunidad a jóvenes talentos de nuestra comarca.
La Tertulia vive del presente y mira al futuro con decisión.
Es la expresión de una sociedad civil que no se resigna, que propone, que piensa y que actúa.
Porque solo así, hablando de lo que importa, se construyen pueblos más justos, más vivos, más humanos.
Pablo Carrillos Huertas
No hay comentarios:
Publicar un comentario