La última que asoció un apellido tan murciano como Huertas con apellidos de aquí como Navarro o Carrillos, se marcho con 102 años de vida, se mereció vivir tantos años porque dedico muchos atendiendo a su familia.
Hermana de mi madre, que marcho antes que ella, muy honradas de su apellido Huertas que trajeron a Petrer en 1932 con 12 años desde las tierras mineras de Cartagena, con sus padres, Juan y Maria, Juana y Eustaquia serían de las primeros emigrantes que llegaron.
Su padre, era minero, mi abuelo Juan ya vino con silicosis, esa fatídica enfermedad minera que se lo llevó muy joven, con 52 años.
Solas se quedaron aquí, vino la madre de mi abuela, ellas buscando trabajos, mi madre y mi tía en escuela más pendientes de trabajar que de estudiar, cursos de modistas, aprendices de aparado y corte, aprovechando el inicio de las fabricas de zapatos, se integraban en las constumbres laborales del pueblo.
Vivieron siempre en Petrer aquí se casaron, nacimos nosotros y no se desvincularon nunca de sus raíces cartageneras.
Nos enseñaron a hacer familia, a visitarnos y hoy en la despedida de la última Huertas estábamos todos sus descendientes que seguiremos manteniendo la unión y familiaridad que nos enseñaron.
Pablo Carrillos Huertas
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