martes, 20 de octubre de 2020

EDU, EL NUEVO CID, PINTOR Y HUMORISTA. ARTISTA RESIDENTE EN PETRER

 

La risa es una actividad de la inteligencia. J.  del Rey


                                                     Francisco Máñez Iniesta

Eduardo Ibáñez Juanes, Edu, nació en el pueblo burgalés de Palacios de la Sierra en el año 1941, nueve meses después de que su padre saliese de la cárcel de Madrid, a los dos años de haber terminado sin armisticio la peor guerra incivil, que son como  terminan las peores guerras. El niño se llamará Eduardo, como el compañero de trinchera de su padre  y se le bautiza como mandabanlos cánones de los vencedores. Sus padres contraen matrimonio religioso, pues su matrimonio civil del año 1933 no fue válido  a los ojos del nuevo régimen.


Su ascendencia genética fue notoria marcando huella en Palacios, pues  Fernando,  el abuelo  materno, fue artífice en la talla de la madera cuenta también con las artes de su hermano, pródigo en la organización de los bailes del pueblo, pues ambos son virtuosos en el dominio musical  de varios instrumentos. También se unía a ellos Atilano, el abuelo paterno y aventurero trotamundos, el que viajó a Cuba dos veces para cortar caña; el que fuera nombrado alcalde del pueblo en la dictadura de Primo de Ribera.

Su padre, de profesión cantero y albañil,  dotado de una fibra poética popular, disfrutaba del humor de sus composiciones en cuartetas de temas públicos, durante las fiestas a San Sebastián dentro de los concursos de rimas  humorísticas. Todos ignoraban que la nueva saga de cuatro hijos de Alberto y Teodora, Alberto y Eduardo ingresarían en el Diccionario de la Cultura en Burgos –Siglo XX,  que contenía  cerca  de 10.000 dibujos entre viñetas de humor, caricaturas, y alrededor de un millar de pinturas al óleo, además de ser el humorista más premiado de España y numerosos premios del extranjero lo acreditaba.

Decididamente, Edu de la mano de su familia, abandonan su cuna en el año 1951 en buscan de una  nueva esperanza. Abandonando su paisaje idílico,  caminan hacia las luces suaves del Este, que como  buena premonición les guiaba por un nuevo camino que les conducía hacia una nueva vida, bañada por la radiante luz  del mediterráneo,   albor que se fijaría en sus retinas y jamás se separaría de ella…  Y allí se encontró  con la misma dureza de la vida en su  lucha para salir de  las miserias de aquellos duros años, pero con la esperanza de que la vitalidad industrial del área  mediterránea y su variada industria cambiara la suerte de  toda  su familia. 

Ya  establecidos, su infancia trascurrió con su nueva vida entre Novelda y Petrer envuelta con sus eternos perfumes del Azahar  marítimo, que envolverían  los lienzos de sus  pictóricas imagines mientras transcurrían los años desde 1941-1951. El viaje  les lleva a Novelda en 1949, donde el padre estuvo hospitalizado durante la guerra haciendo muy buenos amigos, después haber de eliminar la alternativa de emigrar a Latinoamérica, como hiciera durante un par de años el abuelo paterno solo para  trabajar.

De noche, Alberto el mayor,  hace un curso de pintura por correo,  que el niño Eduardo  también aprovecha con la ayuda del hermano. Edu, ya muy avispado   de camino al cole conoce un taller  donde se fabrican escobas y consigue emplearse a ratos y  con lo que gana,  la madre paga el alquiler. La anormalidad de que un niño trabaje, en la pos-guerra- se toma como que  la vida  sonríea los pobres y les premia  con trabajo.

Más tarde, gracias a la relación casi familiar con José Martínez, los Ibáñez  fijaran su residencia definitiva en Petrer en 1951, y Edu a sus 10 años se incorporaba al mundo  laboral como aprendiz de zapatero.En España, durante los años 40 y 50, el humor gráfico se hallaba encorsetado por la censura, cuando no directamente dirigido por consigna, como era práctica habitual en la prensa escrita de la época bajo la Ley de Prensa de 1938, surgida en plena guerra civil. Durante los años 60, sin embargo, la situación cambió sustancialmente, sobre todo a la nueva normativa de la Ley de Prensa e Imprenta de 1966.


Si  nos quedamos con el Edu,  humorista, existe otro Edu que pinta como los ángeles , gracias a las clases de su hermano Alberto Ibáñez, que a su vez también asistía a las clases de pintura en  el Colegio Padre Manjón de Elda, hoy también reconocido importante pintor,  que  le clavó el aguijón de la pintura a temprana edad, además de cómo buen maestro con su alumno, viajaban  a Madrid estudiando las pinturas  del  museos del Prado, Sorolla, Lázaro, Galdino…sintiendo verdadera admiración por Rubens y El Bosco.

Muestra de la excelente pintura  de Edu se pude ver en su estudio-museo donde trabaja realizando paisajes, bodegones, retratos… y algún sueño erótico  tomando como musa a Claudia Schiffer. Recíprocamente,  luego, sería Edu el que le contagio a su hermano al arte de la viñeta.

En aquella  España  sin  libertad, Edu fue  hijo de su  ausencia y en sus alforjas estaba la  suma  de aquella terrible posguerra  iniciando  un nuevo camino equivocado en que la represión del ejercicio de la libertad  que podría cortar la vida.  La libertad y la vida  no tenían la misma lectura. Duelo y Éxodo, La cuadrilla,  bebedores, la espera,  ascos, duelo…fueron sus primeras pinturas al óleo,  auténticos testigos patéticos de su  denuncia social,  dignos de estar en un futuro museo.   Edu  en sus lienzos de  crítica y denuncia, también plasma sus sueños trasportándonos en su nube cromática especial;  pero es a través de sus viñetas, donde ha sido uno de los españoles más ponderados con todos los honores, sin olvidarse  de sus  jocosos libros de humor y poemas.

Su esplendoroso futuro le depararía ser el nuevo Cid Campeador del Humor de Palacios de la Sierra; el nuevo Cid ganador de “mil concursos” con  honores y certificaciones de todas sus victorias obtenidas, pues sería el ser el humorista más premiado y aplaudido  de España. Y aquí síque hay señalar, que hay premios que se ganan con  el trabajo del esfuerzo callado, y otros  obtenidos  por efecto falso“amiguismo”.


 
José María  Bernabé  y  Edu en plena  fiesta  y  salsa de humor.

En el periodo de su juventud, uno de sus amigos de verdad lo fue el fallecido José María Bernabé, quien  sería en el futuro Catedrático de Geografía e historia  de la Universidad de Valencia, también aficionado al dibujo de humor, quien le llevó a colaborar en 1960 y1961 en sesudas muestras de humor, dando el campanazo con la exposición de su viñeta ,presentado un dibujo de un cenicero con una leyenda que decía: “aquí vienen a morir los ideales del hombre” aprovechando la circunstancia de la popularidad de la marca de tabaco” Ideales”.

Como humorista gráfico,  empezó a publicar en prensa y revistas de humor, obteniendo  los máximos galardones, así como el premio Paleta Agromán – el Oscar del Humor  que ganó dos veces, considerado como el Oscar del humor nacional. También tiene el reconociendo del Club Internacional de Prensa y la dos Antorchas del humor, y el reconocimiento  de su tierra natal al nombrarle  burgalés del año 1974 y ser  incluido en el Diccionario de la Cultura en Burgos- siglo XX de Fernando Ortega, considerando su obra como una nueva línea de humor que oscila entre lo ingenuo y lo intelectual, que va del esperpento al retrato psicológico. Es el momento en que su humor empieza a viajar por los certámenes internacionales empezando a conocer Europa competiendo  en Bélgica, Montreal e Italia..

En España publica en la revista Ciudadano, Marca, Arriba, en el suplemento Blanco y Negro de ABC, La Codorniz, 7 Flechas, en la revista Vía Libre  de la Renfe, la vista médica Tauta y el amplísimo abanico de las revista semanales. DDT, CAN CAN, Actualidad Económica, Sábado  Gráfico. Diario Pueblo en 1973 con dos viñetas diarias. En este largo camino hizo amigos como Cavero posterior director de la revista Interviú, Fernando Onega, Forges…Edu es su marca  polifacética en el mundo del arte. Sunombre simboliza un concepto nuevo de arte interesante y ello genera un interés que se le manifiesta cuando en el año 1986 recibe la invitación para exponer en la Galerie  Salammbo de París, junto a obras de sus paisanos Dalí, Picasso e Hinsberge, el italiano toffili  de luces vibrantes,  Gozlán.

Petrer, tiene de hecho un nuevo hijo adoptivo, pero de los de verdad, de los que se casan con aquí, tienen hijos y pagan sus impuestos aquí. Aquí  creció y se  crió bebiendo y participando de nuestra cultura, aunque siempre llevó en su corazón las leyendas de la mítica castilla, y a su “invencible vecino de Vivar, el Cid Campeador”. Algunos de sus amigos, desde su juventud siempre fueron los  redactores del periódico local  Villa, los que ahora con sus achaques se cuentan sus batallitas con más vehemencia y testarudez en la cafería que la  llaman con humor el Club Alzheimer.

 Eduardo Ibáñez Juanes,  en sus distintas exposiciones nos deja su extensa y valiosa obra dónde el Edu, humorista gráfico, el  pintor en oleos, el caricaturista de personajes mundiales,  el poeta, el filósofo y  escritor  libros  nos deja su visión personal del mundo con sus encuentros y desencuentros, donde, como ya sabemos dolorosamente, nada en la vida – tan llena de contradicciones- no es del color con que se pinta, y de la vida y su mentira, nuestro amigo Edu sabe bastante.

Ya  jubilado ,  guarda  un  precioso extenso    legado de pinturas  … que  como  tantas otros  de  autores  locales dormirán eternamente el los  olvidados trasteros  de  la  casas, privando a los  pueblos y sus  visitantes  , cada  vez  más,  de la  contemplación  permanente de  sus  varios   artistas  en  diferentes  muestras  locales  artesanas.


 

Edu   recibiendo un  premio al humor  de   la  universidad de  Alicante.

 

             

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario